Por qué crear un repaso personal de fin de año funciona (sí, de verdad) y cómo hacerlo

Todos hemos tenido un año complicado.

Los humanos solemos resistirnos a los cambios. Sin embargo, por mucho que intentemos evitarlo, este año nos ha cambiado a todos la vida tal y como la conocíamos. Algunos de nosotros hemos perdido el trabajo, otros han visto cómo sus relaciones amorosas o de pareja llegaban a su fin. Hemos tenido que convivir con la enfermedad y la pérdida a escala mundial. Y como consecuencia de todo ello, nos hemos visto forzados a cambiar nuestras prioridades; hemos mirado en nuestro interior y nos hemos visto obligados a re-evaluar nuestras vidas.

Ahora que 2020 llega a su fin, deseamos ayudarte a entender mejor estos últimos 12 meses de nuestras vidas y, con ello, a prepararte para el futuro. Hoy nos gustaría invitarte a que te detengas por un instante. Solo durante unos minutos. Deja de desplazarte por la pantalla, pulsa el botón de pausa en tu lista infinita de obligaciones y permite que te guiemos para que elabores tu propio repaso personal de fin de año. Ahora que estamos a punto de entrar en el que solo puede ser un año mejor que el anterior, trabajemos juntos en nuestros planes para 2021 y empecemos a implementar nuestras agendas con nuevas prioridades. 

Empieza con lo que tienes

Evaluar algo siempre implica hacerse esta pregunta: ¿cuál es el punto de referencia contra el cual nos medimos? En sofisticados términos empresariales, diremos que buscamos metas e Indicadores clave de rendimiento (KPI). En este caso, no obstante, te recomendamos que empieces como lo haría cualquier pequeño negocio que acaba de abrir: un inventario. Todo lo que necesitas es papel y lápiz (o cualquier otro dispositivo de tu propia elección), la lista de verificación que encontrarás a continuación, y un pellizquito de mindfulness para asegurarte de que no cruzas la frontera y caes en el territorio de juzgarte a tu mismo. (Adelante, crítico interior).
¿Qué has hecho este año…

… profesionalmente hablando?
… en el terreno financiero?
… con respecto a tu vida amorosa? (incluye también a tus amigos y familiares)
… por lo que respecta a tus metas personales?
… con relación a tu salud y a tu estado de forma?
… con relación al ocio y la diversión?

Responde a estas preguntas por escrito, área por área:

1. Tus tres logros personales más destacados (por pequeños que creas que sean).
2. Tus tres contratiempos más destacados (no te entretengas en explicártelos; simplemente lístalos y pasa al siguiente punto).
3. ¿Cómo te sientes sobre todo esto? Responde sin juzgarte. Solo tus sentimientos, puros y claros. Nada más.

Como todos hemos pasado un año complicado, a modo de clarificación y para que te hagas una idea, yo, bajo ‘logros personales’, he escrito «compré unos cuantos libros nuevos». No los he leído todavía, pero eso no importa porque ya es un pequeño paso hacia delante que me llevará a cumplir mi objetivo de leer más libros. Por lo tanto, intentemos echar un vistazo al año pasado, pero con una actitud positiva y con gratitud por lo que fue bien, independientemente de que fuera minúsculo e inconsecuente.

¿Hacia dónde vas?

Ahora que ya tienes una base desde la que arrancar, ha llegado el momento de ahondar en lo que realmente deseas. Y sí, sabemos que no es una pregunta sencilla. En la vida siempre actuamos influidos por las fuerzas, en contante conflicto, que ejercen nuestras prioridades y nuestros deseos. A veces, además, ni sabemos qué son estas fuerzas. Así que, no seas duro contigo mismo; y, por si te sientes estancado, aquí tienes unos pequeños consejos.

Recuerda que no existe ningún manual que nos diga cómo vivir la vida y que, por lo tanto, todo lo que hacemos es tocar de oídas. Claro, hay gente que actúa cómo si supiera exactamente cómo funciona todo y lo tuviera todo calculado y controlado; si no fuera por el pequeño detalle de que nuestro tiempo es limitado y en la vida no hay ningún tipo de certezas. Esto puede sonar deprimente, pero si piensas en ello verás que es bastante liberador. Nadie sabe cómo vivir su vida, y la persona que eres hoy podría ser una versión completamente diferente de la persona que eras hace 10 años o incluso hace 10 meses, y eso es perfectamente normal.

Así que, no sientas presión, siéntate y siéntete cómodo contigo mismo, y simplemente escoge una dirección que por ahora te suene bien. No tienes que entrar en detalles. Cualquier dirección, por vaga que sea, será suficiente. Vuelve a tomar tu papel y lápiz (o el teclado), y pregúntate:

¿Dónde me gustaría estar en 1 año…    

…profesionalmente hablando?
…y financieramente hablando?
…con respecto a mi vida amorosa? (incluye también a tus amigos y familiares)
…por lo que respecta a mis metas personales?
…con relación a mi salud y mi estado de forma?
…con relación al ocio y la diversión?

Escribe una meta genérica para cada una de estas preguntas. Aquí tienes algunos ejemplos:

– “A nivel laboral, me gustaría cambiar de profesión / hacer un trabajo más satisfactorio / encontrar un nuevo trabajo.” o “Por lo que respecta a mis metas personales, me gustaría aprender un idioma / leer más libros / crear y trabajar en un proyecto personal.”

– “Respecto a mi vida amorosa, me gustaría conocer a alguien / pasar más tiempo con mi pareja / volver a tener relación con mis amigos.”

Pero, atención: todos queremos siempre tocar el cielo, independientemente de lo que eso represente en tu caso; sin embargo, ten en cuenta que cuanto más pequeñas sean tus metas, más posibilidades tendrás de lograrlas. Así que empieza por abajo. Después de todo, Roma no se construyó en un día. Tu crítico interior puede gritar a viva voz todo lo que quiera, porque criticar es fácil, pero crear y construir es mucho más difícil. 

Traza un plan

Ya casi estamos. Lo estás haciendo muy bien. Ahora ha llegado el momento de reunir todas tus fuerzas y poner en práctica todo lo que has estado pensando. Bajo cada meta, escribe uno o dos sub-objetivos, desglosando la meta principal en pasos más pequeños y más fácilmente conseguibles. Ejemplo:

Mi objetivo para el año que viene es: cambiar de profesión.

Así que necesitaré:        

1. Volverme a formar y aprender nuevas habilidades.
2. Encontrar un mentor.
3. Encontrar una empresa a la que me pueda adaptar, o bien hacerme trabajador autónomo por cuenta propia.

De manera alternativa, quizás te gustaría volver a contactar con tus amigos, en cuyo caso tu sub-objetivo sería reservarte tiempo para poder mantener llamadas semanales con ellos. Para una máxima efectividad, ¿por qué no reservas tiempo en el calendario y apuntas recordatorios de dichas citas?

A diferencia de tus metas generales, los sub-objetivos tienen que ser concretos, incluso cuando se trate de pequeños pasos dentro de un propósito superior. A veces no es hasta que das un pequeño paso que no te das cuenta de la necesidad de dar el siguiente. Así que ten fe en ti mismo y apunta lo que realmente puedas hacer; el resto ya vendrá sobre la marcha.

Date las gracias a ti mismo

Para la mayoría, este 2020, como año, ha sido un auténtico reto; así que tómate tu tiempo para reflexionar sobre tus aspectos personales fuertes y la resiliencia que has mostrado y que te ha ayudado a superar este difícil período.

Si has llegado hasta aquí, entonces debes darte las gracias a ti mismo por mostrar coraje y carácter; por perseverar en medio de tantas dificultades y retrasos; por ayudar a otros cuando lo han necesitado; por poner los miedos, preocupaciones y problemas a un lado y tirar adelante tus tareas diarias en beneficio de todas aquellas personas que dependen de ti; y, por encima de todo, por hacer todos los sacrificios que han sido necesarios durante la epidemia para asegurarte de que las personas más vulnerables de tu comunidad se mantuvieran seguras y a salvo.

Quizás este ejercicio te ayudará a reconocer tus propias fortalezas y debilidades, el auténtico equilibrio que mantienes entre vida personal y vida profesional, o el hecho de que dependes más de lo que pensabas de las personas que te rodean. Pero por encima de todo, esperamos que el ejercicio sea una oportunidad para que puedas celebrar tus logros, para que tomes aire y le des la bienvenida al nuevo año con una actitud totalmente positiva. ¡Brindemos por el futuro!