Pioneros del cine afrodescendiente

En el cine, las personas afrodescendientes a menudo han luchado para que se cuenten sus historias, haciendo campaña frente a los prejuicios sociales e industriales. Aunque todavía queda trabajo por hacer, los cines y los servicios de streaming ofrecen hoy en día una gama mucho más diversa de experiencias cinematográficas, muchas de las cuales están inspiradas en personas que rompieron barreras en el pasado. Destacamos algunos de los nombres que nos han hecho reír, llorar y mirar el mundo de forma diferente.

Chadwick Boseman

Parece adecuado empezar con un actor que sigue inspirando a múltiples generaciones. Recreó la historia interpretando a la leyenda del béisbol Jackie Robinson (42), al Padrino del Soul James Brown (Get On Up) y al primer juez afroamericano del Tribunal Supremo Thurgood Marshall (drama Marshall). Sin embargo, se convirtió en una superestrella mundial con Pantera Negra, el primer protagonista no blanco del Universo Cinematográfico de Marvel. Combinando la responsabilidad social con el espectáculo de Hollywood, Boseman se convirtió en un icono inmediato para millones de personas, pero en la cima de su popularidad libró una batalla secreta contra el cáncer que acabó cobrándose su vida el año pasado. La oleada de homenajes en todo el mundo es todo lo que hay que saber sobre el impacto que tuvo el actor en tan solo 43 años de vida.

Noble Johnson

Un siglo antes del éxito de Boseman, el actor Noble Johnson también intentaba contar historias que llegaran a un público más amplio. Actor del sistema de estudios de Hollywood durante la Era Silenciosa (apareció en King Kong, de 1933, y en La momia, de Boris Karloff), se sintió frustrado por las limitaciones de los papeles disponibles para los actores afroamericanos, que se basaban en estereotipos. En 1916 fundó The Lincoln Motion Picture Company, el primer estudio que se centró en películas hechas para el público negro por creadores y elencos negros. Aunque solo duró siete años, Johnson y su trabajo sentaron las bases sobre las que otros se apoyaron en años posteriores.

Ava DuVernay

Ava DuVernay rompió varios techos de cristal con Selma, su película biográfica en 2014 sobre el líder de los derechos civiles Martin Luther King. Se convirtió en la primera mujer afroamericana en ser nominada a un Globo de Oro a la dirección, y en la primera mujer afroamericana en dirigir una película nominada a la mejor película. Como cineasta poderosa e imaginativa, combina su trabajo narrativo con documentales asombrosos como 13th (por el que recibió otra nominación al Óscar) y muchas series dramáticas impactantes. Ha estado en la vanguardia de la lucha contra la desigualdad en la industria cinematográfica estadounidense, luchando por un camino más justo para los que vengan después de ella.

Sidney Poitier

En la década de 1960, Sidney Poitier se convirtió en uno de los mayores atractivos de la industria cinematográfica con una serie de éxitos que desafiaron la percepción de los personajes afroamericanos en la pantalla. Su trío de clásicos: To Sir, With Love, In The Heat of The Night y Guess Who’s Coming To Dinner? pusieron el foco en conversaciones que Estados Unidos no quería tener. Muy consciente de su importancia en una época de grandes cambios, apareció en las marchas por los derechos civiles, como la Marcha sobre Washington, que fue testigo del discurso “Tengo un sueño” del Dr. Martin Luther King. A día de hoy, los grandes de Hollywood lo consideran un auténtico pionero de la industria.

Channing Godfrey Peoples

De un consagrado creador de historia a un futuro potencialmente rompedor. El drama Miss Juneteenth, de Channing Godfrey Peoples, sobre una madre que intenta alcanzar sus objetivos a pesar del racismo sistémico, cautivó a la crítica y al público al ser nominada a dos premios Independent Spirit. Inspirada en los acontecimientos políticos del año pasado, su siguiente trabajo fue el corto Dorothea’s Blues, que demostró un don para la narración que hará que los próximos pasos de la cineasta sean intrigantes.

Samuel L. Jackson

Una de las estrellas más populares de todos los tiempos sigue siendo también una de las más activas incluso a los 72 años. Llegado al cine relativamente tarde, Jackson aparecería en pequeños papeles en películas como Goodfellas y en la obra del director Spike Lee, hasta que una actuación nominada al Óscar en Pulp Fiction, de 1994, lo lanzó a la estratosfera. Desde entonces, ha estado en el centro del Universo Cinematográfico de Marvel, ha tenido reencuentros regulares con Quentin Tarantino y ha deleitado al público en más de 150 apariciones en películas (y contando). Un intérprete inolvidable, que sigue siendo la referencia para los actores de todos los orígenes.

Sir Steve McQueen

“Todo el mundo merece no solo sobrevivir, sino vivir”. Esta conmovedora declaración se produjo hacia el final del discurso de Sir Steve McQueen en los Óscar, cuando su película 12 años de esclavitud se llevó el premio a la mejor película en 2014. Esa misma noche, el cineasta británico se convirtió en el primer ganador negro del Óscar al mejor director, lo que supuso la culminación de una carrera de vanguardia en la narración de historias. Desde sus primeros e intensos dramas como Hunger y Shame, hasta su serie antológica Small Axe para la BBC, pocos artistas pueden inspirar tanto discurso y asombro con cada nuevo trabajo.

Mya Taylor

Aunque la representación LGBTQ+ está creciendo en la televisión, en el cine todavía es difícil de verla. Mya Taylor hizo historia con su debut en 2015 en Tangerine, la salvaje comedia dramática de Sean Baker ambientada en Nochebuena. Su victoria como mejor actriz de reparto en los Independent Spirit Awards fue la primera para una mujer transgénero en los premios, mientras que su campaña para los Óscar, junto con la coprotagonista Kitana Kiki Rodríguez, fue la primera vez que un estudio apoyaba a los intérpretes transgénero. Aunque no tiene la misma amplitud de trabajo que otras de esta lista (Tangerine fue su debut como actriz, después de haber trabajado durante años como trabajadora sexual en Hollywood), el impacto de su actuación y su victoria se sentirá durante años.

Spike Lee

Durante casi 40 años, el hijo predilecto de Brooklyn ha hecho películas que exigían atención. Historias divertidas y complejas como Do The Right Thing (1989) y el debut She’s Gotta Have It lo hicieron famoso, antes de captar el estado de ánimo de una amplia comunidad en los años 90 con los potentes dramas Malcolm X y Get On The Bus. El galardonado, amante del baloncesto, se siente igual de cómodo trabajando con los grandes estudios en películas como Inside Man y Da 5 Bloods de Netflix. Sea cual sea la plataforma, sigue demostrando a cada generación que es vital contar una historia a su manera.

Denzel Washington

Denzel Washington, uno de los mejores actores de todos los tiempos, irrumpió en la década de los ochenta y se dio a conocer por sus papeles, que te llevan al borde del asiento. Tras asumir el elevado papel de Malcolm X en la película homónima de Spike Lee, su brillante carrera le ha llevado a interpretar desde un policía corrupto en Training Day hasta un abogado activista en Filadelfia, y a sus 66 años todavía tiene a sus fans entusiasmados con la próxima adaptación de Shakespeare, La tragedia de Macbeth. Su trabajo en el escenario y en la pantalla ha marcado la pauta no solo para la representación en Hollywood, sino para los actores de todo el mundo.

Halle Berry

“Esto es para cada mujer de color, sin nombre y sin rostro que ahora tiene una oportunidad porque esta puerta esta noche se ha abierto”. Esta fue la dedicatoria de Halle Berry cuando se convirtió en la primera mujer afrodescendiente en ganar el premio a la mejor actriz en los Óscar de 2002, por su interpretación en Monster’s Ball. La actriz, que ha formado parte de las franquicias de Bond, X-Men y Kingsmen, también ha sido una firme defensora de muchos temas importantes. Sin embargo, la historia de Hollywood siempre cambiará por el momento en el que aprovechó su presencia en el mayor escenario de la industria para reconocer a los que vinieron antes y después.

Dorothy Dandridge

La cantante y actriz Dandridge, una de las protagonistas a las que Berry dedicó su premio, murió en 1965 con solo 42 años. Sin embargo, años después, se encuentran estatuas y murales a su legado por todo Estados Unidos, mientras que artistas modernos encuentran inspiración en ella, como Janelle Monae, que escribió la canción Dorothy Dandridge Eyes. La razón de este reconocimiento se debe a una carrera que goza del tipo de éxito e influencia que no solo inspiraría a futuros intérpretes negros, sino que crearía una obra que rivalizaría con la de muchas primeras damas del cine. Fue la primera estrella de cine afroamericana en ser nominada al Óscar, por la icónica Carmen Jones, un musical de 1954 que desde entonces ha sido homenajeado por Beyoncé. Una estrella que brilló brevemente, pero lo suficiente para que el mundo entero la viera.

Richard Pryor

Aunque su comedia fue polémica, Pryor rompió el molde en lo que se refiere al stand-up y al cine. Conocido por haber influido en prácticamente todos los monologuistas que le siguieron, Pryor fue descrito como el “Picasso” de la comedia, y convirtió esa hilaridad en una de las mayores estrellas cinematográficas de los años ochenta con éxitos como Brewster’s Millions y Stir Crazy. Sus problemas de salud hicieron que su carrera como actor se viera truncada una década antes de su muerte, en 2005, pero su determinación de ir más allá en todos sus esfuerzos artísticos garantiza que su legado nunca será olvidado.

Jordan Peele

¿Cómo se mueve la industria del terror? Entretejiendo el contexto de la vida real en tu historia de terror. Jordan Peele, hasta entonces conocido por su comedia, se convertiría en un nombre importante detrás de las cámaras gracias a Get Out, un gran éxito del 2017 que se inspiró en las relaciones raciales en Estados Unidos. Amplió su éxito con la continuación de Us, la serie de televisión The Twilight Zone, y está dispuesto a continuar con el ominoso proyecto de próxima aparición Nope. Sin embargo, Peele también ha utilizado su influencia como productor para defender a nuevos cineastas y talentos de la interpretación, como la directora de Candyman, Nia DaCosta.