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¿Puedes recitar de memoria los guiones de Star Trek? ¿Estás contando los días que faltan para la próxima temporada de The Crown? ¿Tienes tu propia réplica de la carpa de The Great British Bake-Off en tu jardín? Entonces puede que seas un superfan.

La televisión siempre ha tenido seguidores leales y dedicados desde los primeros días de la televisión por cable, pero nuestra era actual hiperconectada ha revolucionado la forma en que vemos, interactuamos e incluso añadimos a los mundos de la pequeña pantalla que amamos. A continuación, hablamos con cuatro superfans para que nos expliquen por qué disfrutan de su programa favorito, y cómo, en algunos casos, se convirtieron en parte de su historia.

Los Simpsons

Allie Goertz y Julia Prescott del podcast Round Springfield
A mediados de la década de 2010, las escritoras e intérpretes Allie Goertz y Julia Prescott se unieron por su amor a Los Simpson. Así que hicieron lo que cualquier millennial entusiasta haría: crearon un podcast.

En su proyecto Everything’s Coming Up Simpsons, la pareja charlaba con invitados sobre sus episodios favoritos de Los Simpson, entre los que se encontraban actores como Ben Schwartz y Mara Wilson, así como la propia voz de Bart, Nancy Cartwright. Tras cuatro años, a Everything’s Coming Up Simpsons le siguió Round Springfield, un podcast en el que hablan con los creadores de Los Simpson sobre sus carreras y su trayectoria en la serie.

Los Simpson es un campo difícil para un superfan, porque a diferencia de muchas series, es algo que casi todo el mundo conoce al menos un poco. “Todo el mundo ha crecido con ella, por lo que existe un conocimiento básico de palabras y frases que han entrado en el léxico cotidiano”, dice Prescott. “Igual hay cosas que puedes hacer, o en las que puedes profundizar, que te elevan a ese estatus superior: cuando Allie y yo nos conocimos, fue a la semana de hacerme el tatuaje de los Simpsons (la Venus de Milo de goma del episodio ‘Homer Badman’ en mi hombro derecho). Los fans de Los Simpson son un grupo intelectual, así que para subir realmente la escalera, tienes que centrarte en los ángulos más intelectuales de la serie”.

Para Goertz, la participación es la clave: “Mi creencia personal es que para ser un superfan de cualquier cosa, tienes que contribuir a la cultura de los fans de una forma u otra. Organizar un podcast de Los Simpson o una noche de trivia, hacerse un tatuaje de Los Simpson, hacer fan art, cosplay, hacer videoensayos de Los Simpson o ponerle a tu mascota o a tu hijo el nombre de un personaje de Los Simpson”.

Goertz y Prescott comenzaron su podcast después de encontrar poco en el medio que realmente celebrara lo que amaban. El espacio de los podcasts estaba claramente en alza, pero los “podcasts de superfandom” parecían un poco escasos, sobre todo en lo que respecta a Los Simpson”, dice Prescott. “Había muchos programas en los que aparecían dos tipos en un sótano citando sus frases favoritas o, lo que es peor, criticando la serie y entrando en esa zona de ‘ya no es buena’. Lo cual es una toma increíblemente aburrida”.

Aunque los invitados al podcast -y los fans de Los Simpson en general- proceden de distintos ámbitos, hay algunos factores comunes que unen a los amantes de la serie. “Mucha gente creativa se acerca a ella y la reconoce por su genialidad: la estructura de los chistes, la estructura de la historia, el hecho de que casi todos los episodios empiecen de forma totalmente diferente a como acabará el episodio”, dice Prescott. “Creo que es un verdadero estudio sobre la anarquía en un entorno algo controlado. Creo que eso atrae a los fans que pueden ser un poco polémicos”.

Goertz concuerda: “No toda la gente a la que le gustan Los Simpson es buena, pero a toda la gente buena le gustan Los Simpson”.

El éxito del podcast ha llevado a Goertz y Prescott a “escribir el libro” sobre el programa, literalmente, publicando 100 Things The Simpsons Fans Should Know & Do Before They Die en 2018. “Hubo muchos desafíos al escribir el libro, pero el mayor, en mi opinión, fue seguir el formato”, recuerda Goertz. “¿Qué podíamos escribir que no conocieran los fans más acérrimos de Los Simpson y que, sin embargo, fuera atractivo para el espectador promedio? Fue una tarea difícil, pero al final mereció la pena el estrés y las noches en vela”.

Prescott, por su parte, cruzó el umbral definitivo para cualquier superfan: formar parte de la historia del programa. Fue la guionista de un episodio real de Los Simpson, “La casita del horror XXXI”, que se emitió el año pasado.

“Fue una locura -¡todavía lo es!”, recuerda. “Tenemos un episodio de Round Springfield que habla más o menos del paso a paso, pero fue surrealista, por decirlo así. Cuando escribí el guion, no dejaba de pensar ‘¡Ahhh! ¿QUÉ ESTOY HACIENDO?’ una y otra vez”.

Encuentra todos los episodios de Round Springfield en maximumfun.org.

RuPaul’s Drag Race

Janet The Planet
RuPaul’s Drag Race es un ícono de la representación LGBTQ+ en la televisión. En los 12 años transcurridos desde su primera temporada, el programa ha acumulado seguidores en todo el mundo y ha lanzado versiones locales del concurso en ocho países diferentes, como el Reino Unido, Chile y Australia. También ha convertido a antiguos concursantes en megaestrellas.

Una de esas estrellas es la diseñadora e ingeniera mecánica Janet T. Planet, que pasó de superfan a favorita de los fans cuando apareció en la 12ª temporada de la versión original del programa en Estados Unidos. Participó en un reto en el que los superfans eran emparejados con las drag queens competidoras para que les hicieran cambios de imagen al estilo de esa concursante. El episodio de Janet contó con la presencia de la estrella de Hollywood Daisy Ridley como jueza invitada.

Explicando en el episodio cómo el arte del drag le ayudó a adoptar su propia imagen (se cambió legalmente el nombre a Janet The Planet), Janet revela que su afición fue casi instantánea: “Mi querida amiga Mona me habló de la serie un par de episodios de la primera temporada, sabiendo que me iba a ENCANTAR”, dice entusiasmada. “Ella y yo la veíamos juntas siempre que podíamos. Desde entonces, he vuelto a ver todos los episodios de Drag Race varias veces”.

Tras ver una convocatoria de superfans en las redes sociales, Janet presentó un video y fue invitada al programa, creyendo que simplemente se sentaría entre el público. “Cuando llegamos al set, el equipo mantuvo la idea de que íbamos a ser miembros del público, con un grupo de ellos firmando y uniéndose a nosotros en la zona de espera”, recuerda. “Luego nos sacaron a los seis y nos llevaron a la sala Werk. La sorpresa en nuestras caras fue real”.

Dicen que nunca debes conocer a tus héroes, pero la estrella del espectáculo era, al parecer, todo lo que Janet esperaba. “Conocer a Ru fue algo fuera de este mundo. Ru es tan bueno que hace que todo el mundo se sienta cómodo. Me encantó cada minuto de nuestras charlas”.

Aunque los realities sean famosos por mostrar una versión sesgada de la verdad, Janet asegura que lo que se vio de su transformación de fan a reina fue auténtico, y su fuerza y honestidad la convirtieron en un éxito instantáneo entre los seguidores del programa. “El viaje de sacudirme mis propias dudas mientras nos preparábamos y practicábamos en la pasarela fue algo más”, dice. “Al final, creo que captaron bien el surgimiento de mi personaje drag”.

“Las muestras de cariño han sido abrumadoras y maravillosas. Incluso conocí a un admirador que trabajaba en el centro de vacunación cuando me pusieron la segunda vacuna contra el COVID. Muchas mujeres altas se han acercado a mí y han compartido lo mucho que significa que alguien dé voz a la experiencia de ser confundida con una drag queen, simplemente por su altura, y también por su exuberante forma de vestir”.

Janet sigue en contacto con sus compañeros superfans y drag queens, pero asomarse detrás de la cortina no ha arruinado nada de la magia. “No puedo resistir las historias de las drag queens, la increíble creatividad y la comedia. Es asombroso ver cómo personas con un talento salvaje rompen sus propias barreras y hacen cosas que no sabían que podían hacer. Es una lección inspiradora para llevar a tu propia vida”.

Sigue en Instagram a Janet @jtplanet.

Doctor Who

Matthew Rowney del canal de YouTube The Who Addicts
La serie británica Doctor Who es una pionera de la televisión de ciencia ficción, que ha inspirado a varias generaciones con las historias de El Doctor, que viaja por el espacio y el tiempo con varios compañeros luchando contra una multitud de villanos nefastos. La serie se emitió inicialmente de 1963 a 1989, antes de ser lanzada nuevamente en 2005 con Christopher Eccleston como protagonista y Russell T Davies como guionista. La serie es conocida por su activa comunidad de fans, y desde 2013, The Who Addicts ha contribuido activamente al discurso.

El cofundador del canal, Matthew Rowney, fan desde el regreso de la serie a mediados de los años 2000, describe la decisión de convertirse en creador de YouTube como una simple extensión de su pasión: “Mi amigo James y yo, quien solía estar en el canal, lo empezamos juntos”, cuenta. “Siempre hablábamos de Doctor Who, de cada episodio, de cada personaje, y teorizábamos sobre lo que podría pasar después. Entonces pensamos: ‘¿Por qué sólo hablamos entre nosotros? ¿Imagina que pudiéramos compartir esto con cientos de personas? Al principio eran dos personas sentadas, hablando de Doctor Who, ¡y nos fue muy bien!”.

Han compartido sus opiniones con mucho más que “cientos”. Con más de 4,7 millones de visitas y casi 29.000 suscriptores, el canal revisa, discute y celebra todo lo relacionado con Doctor Who. “Muchos de nuestros suscriptores son increíbles. También nos llevamos bien con muchos creadores de contenido, hay una gran mezcla”.

Cualquier programa de larga duración está obligado a tener sus problemas de división, lo que puede ser un problema para cualquier fan que exponga sus opiniones, pero Rowney opta por mirar el lado positivo: “Creo que es lo mismo en cualquier fandom”, dice. “Siempre que puedas bloquear a la gente que no quieres escuchar -los trolls, la gente negativa- puede ser una buena comunidad. El año pasado (durante el encierro) fue un excelente ejemplo de ello, con la cantidad de watch-alongs, live streams, tweet-alongs, llamadas de Zoom… Todo el mundo estaba dando play al mismo tiempo, viéndolo juntos”.

Adentrarse en una serie con décadas de historia puede ser una perspectiva desalentadora para algunos, pero para Rowney la serie de 2005 le sirvió de puerta de entrada para descubrir episodios más antiguos. “Lo mejor de cómo volvió en 2005 fue que el equilibrio era perfecto”, dice. “Había nuevas historias, pero lo que (Davies) hizo fue introducir gradualmente cosas que eran más conocidas de la época clásica como los villanos los Daleks, los Cybermen, El Maestro en la tercera serie. No te lo lanzaban todo de golpe. Se fue introduciendo poco a poco, pero había lo suficiente como para darte una idea, como nuevo espectador, y hacer que quisieras volver a ver todo el material clásico”.

Con 16 años como aficionado, y ocho cubriendo el programa para el canal, ¿qué tiene el programa que le hace volver? “Las posibilidades ilimitadas”, responde. “Este programa podría ser eterno, es tan especial y único. Es un programa que siempre te sorprenderá, que siempre te llevará a un lugar nuevo. Puede enjuagar y repetir una fórmula, pero hacerlo de diferentes maneras. Siempre hay un nuevo personaje, un nuevo planeta, una nueva historia… es una caja llena de posibilidades, eso es lo que la mantiene fresca y nueva”.

Sigue a The Who Addicts en Youtube, y descubre más en thewhoaddicts.com.


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