Desplaza

La primavera ya está a la vuelta de la esquina y, por lo tanto, ha llegado el momento de reorganizar el armario.

¿Te sientes abrumado con solo pensar en las montañas de ropa que te esperan para lanzarse sobre ti cada vez que intentes extraer una prenda? ¿Desearías tener una varita mágica que te permitiera ordenar el armario de modo que pudieras ver todo lo que tienes sin tener que buscar alocadamente, ahorrarte tiempo por las mañanas y, más importante todavía, hacer que los famosos ‘cleanfluencers’ de Instagram se mueran en envidia?

 ¡Pues has venido al lugar idóneo! Desde pliegues rápidos a enrollados inteligentes, te ofrecemos un sinfín de técnicas reformativas para que finalmente pongas orden en tu armario.  Y no te llevarán más tiempo del que ahora dedicas a doblar tus prendas. ¡Te lo prometemos! Al contrario, activarán esas felices reacciones químicas que tienen lugar en tu cerebro y harán que desees repetirlas una vez tras otra. ¡No es broma!

Camisetas
¿Dónde ha estado escondida durante todos estos años esta técnica tan inteligente de doblar camisetas? ¡Y funciona tanto para las de media manga como para las de cuello tipo polo! Aunque puede que tengas que practicar un poco al principio, una vez la aprendas todo habrá cambiado para siempre. Es más, los frutos que recogerás en términos de eficiencia y organización te compensarán con creces cualquier frustración que puedas sentir al principio de la curva de aprendizaje. Si tienes manos de mantequilla, no te preocupes y no desesperes. Crea una tabla de pliegues de prendas y observa cómo te saca trabajo de encima. Para ganar en eficiencia en el espacio, usa un pliegue militar(conocido como ‘rollo ranger’) para que la prenda permanezca bien plegada, no se deshaga el pliegue y tenga menos arrugas.

Camisas formales
Estás buscando una manera de guardar (recuerda, pliegues ≠ arrugas) tus camisas de corte más formal? Solo tienes que preguntar a los profesionales de camisería en T.M. Lewin. Para obtener un gran resultado, asegúrate de no saltarte lo siguiente: 1. Usar la tabla de asistencia, en un formato un poco más grande que una hoja A4, asumiendo que se trata de una camisa para talla de adultos. 2. Abotonar la camisa, no solo en los extremos superior e inferior sino también en el medio, o de manera alternativa a lo largo de la tira (de lo contrario, acabarás teniendo más trabajo que al principio). 3. Estirar hacia abajo la camisa por la cola de la misma para que no se formen arrugas inesperadas en el reverso. A continuación, guarda todas las camisas plegadas una encima de la otra en un apilador para evitar que la pila se derrumbe al cabo de pocos días.

Sudaderas y chaquetas
En lugar de meter tu sudadera en un espacio vacío cualquiera del armario y después tener que recogerla de cualquier manera, usa esta ingeniosa técnica estirando a la vez los cordones de la sudadera para que mantenga la forma.  En el caso de americanas o chaquetas, si tu colgador ya está repleto de más prendas de las que realmente está hecho para sujetar, no te preocupes.  Prueba estos ingeniosos consejos antes de contemplar la posibilidad de deshacerte de la chaqueta que heredaste de tu padre o de invertir en un perchero de pie para abrigos. ¡Son trucos fáciles de usar, funcionales y perfectos para viajar!

Jeans, pantalones y shorts
Sí, lo sabemos, llevas toda tu vida plegando los vaqueros de una manera determinada. Pero, ¿quién dice que no podemos romper las normas? Cambia tus normas de siempre y ahórrate tanto espacio como desees. Si tienes varios pares, pliégalos y ponlos en cajas, cestas o estanterías deslizables para llegar a la máxima profundidad del armario. Para pantalones de vestir, pliégalos para colgarlos. Este es nuestro truco favorito: como puedes ver, no hay que ser físico nuclear y los pantalones no se te caerán o resbalarán cuando tengas un día patoso. En el caso de los pantalones cortos, no hay mejor manera que esta: empieza por poner los pantalones cortos planos, enrolla los lados hacia dentro y empieza a plegarlos por el dobladillo y hasta terminar en la cintura, metiéndolos por completo en el borde de la misma cintura. ¡Un método práctico y perfecto!

Medias
Antes de embarcarte en el arte de doblar calcetines, será una buena idea comprobar todos los pares para identificar los calcetines desemparejados o sobrantes que tengas, es decir, los que simplemente han perdido la pareja, los desgastados, los deformados, los devorados por las polillas y los agujereados. Si es posible, reutilízalos con otros fines o bien deséchalos, y a continuación organiza los que te han quedado cada uno con su pareja. Ahora viene lo divertido: como verás, hay más de una manera de hacerlo. Algunos expertos opinan que enrollarlos en forma de rollo o bola puede, con el paso del tiempo, hacerles perder su elasticidad. Una técnica que nunca falla es ponerlos juntos, plegarlos en tercios y meter la punta de los dedos en la abertura. Es fácil de hacer, quedan bien plegados y puedes apilarlos. Si tus calcetines son largos o cortos, mira aquí y toma nota.

Ropa íntima
Para todos aquellos que no vayan sobrados de espacio en el armario, estos métodos de doblar la ropa interior pueden ser un gran invento, ya que permiten guardar más prendas en un mismo cajón y facilitar su extracción, especialmente cuando vas con prisas.  Prueba con estos separadores para cajones y ordena las prendas por tipos en cada espacio (p. ej. braguitas, calzoncillos de niño, bikinis o calzoncillos tipo slip, tipo boxer, etc.), manteniendo todas las pilas intactas sin que se te caigan y se mezcle todo. Descubre más trucos para plegar ropa interior de hombre y de mujer.

Prendas de formas irregulares
Incluso una prenda de forma irregular puede plegarse de manera compacta (¡y sin ser un experto en técnicas origami!) para adoptar una apariencia atractiva y estar siempre bien ordenada. Nos estamos refiriendo a faldas y vestidos entallados o acampanados, bodys, tops de tirantes, leggings, jerséis gruesos (como los de arriba) y muchas otras prendas. Si prefieres volver al siempre popular método Marie Kondo, te recomendamos usar soluciones en venta en tiendas especializadas (como cajas pequeñas, cestas y bandejas) y hacerlo en tándem para aumentar la vida del complicado plegado en la estantería.

Sábanas y demás
Ya que te has puesto a ordenar el armario, no te olvides ahora del otro armario donde guardas las sábanas y los juegos de cama, ya que seguro que también necesitará sus atenciones. En el caso de las toallas de baño, pliégalas por la mitad y después en tercios, después de nuevo por la mitad, y verás que podrás guardarlas perfectamente o colgarlas del toallero sin modificación alguna. Los pliegues en las toallas de baño o toallas de mano dependen de la longitud de la prenda en cuestión, pero generalmente siguen el método de dos pliegues seguidos en tercios o la regla de la mitad. De manera alternativa, si deseas guardarlas en cestas o contenedores, enróllalas tal y como se muestra en la opción 3 aquí. Por lo que se refiere a la ropa de cama, junta todas las piezas de un juego (para más detalles, mira el vídeo); es decir, la funda de la almohada, la sábana de abajo y la de encima, o bien guarda las sábanas en la funda de la almohada correspondiente. De este modo, te será fácil extraerlas y hacer la cama.

 


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