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Este Octubre nos esperan dos importantes secuelas en la pantalla grande como son Blade Runner: 2049 y Thor: Ragnarok, en que el dios del rayo, Chris Hemsworth, se enfrenta al mismímiso Hulk. ¿Pero merece la pena emocionarse con las secuelas? Después de todo, nunca son tan buenas como sus primeras partes, ¿no? Debemos decir que quien piense así, se equivoca. Descubre las 20 mejores secuelas (ya sea segundas partes o incluso terceras, sin spin-offs) que fueron mejores películas que sus predecesoras, y por qué las superaron.

TERMINATOR 2: EL JUICIO FINAL (1991)
¿Cómo es posible hacer la segunda parte de una película que ha definido un género cinematográfico? ¡Haciendo una obra maestra! La primera entrega de Terminator fue brillante, pero en el fondo fue una película de persecuciones que suplicaba una expansión. Terminator 2 tenía un argumento complejo, una ruda heroína llamada Sarah Connor y el malo por antonomasia, T-1000; todos estos elementos crearon una de las mejores secuelas jamás filmadas. Además, nos permitió mostrar nuestro apoyo a Arnie, quien volvía a su papel de protector en vez de asesino. Vamos a olvidarnos de las películas que vinieron después, ¿de acuerdo?

EL PLANETA DE LOS SIMIOS: CONFRONTACIÓN (2014)
Si consideramos que El planeta de los simios: (R) Evolución es la ‘primera’ de esta trilogía, entonces la segunda película de Matt Reeves representó un gran salto cualitativo. Si (R) Evolución se centró en los orígenes de los simios, Confrontación dibujó un escenario en el cual se desencadenaba una batalla entre seres humanos y simios de proporciones post-apocalípticas. Aunque esencialmente se trata de una película de guerra que se pregunta a profundidad sobre las cargas que implica el liderazgo, esta franquicia filmada 50 años después llevó el argumento a un nuevo territorio, demostrando que la captura del movimiento no era ningún obstáculo a la hora de conseguir una interpretación única.

ANTES DEL ATARDECER (2004)
En la película de 1995 Antes del amanecer, Ethan Hawke y Julie Delpy pasaron una noche caminando y hablando por Viena, pensando que jamás volverían a verse. La segunda película los muestra haciendo justamente eso, pero ahora en París, después de que sus vidas habían continuado por caminos separados pero sin haber conseguido olvidar aquella noche. Un diálogo excelente sirve de fundamento para una historia que revierte la naturaleza soñolienta de la primera película. Si Antes del amanecer fue una celebración de exuberancia juvenil, Antes del atardecer encara la cruda realidad de crecer y hacerse mayor. Y eso es, precisamente, lo que la hace una mejor película.

ARMA MORTAL 2 (1989)
Mel Gibson y Danny Glover llegaron a lo más alto con esta comedia de acción en la que se enfrentaban a narcotraficantes sudafricanos. A pesar de contener algunos de los peores acentos sudafricanos jamás oídos en una película, esta secuela es mucho más fuerte que la primera película ya que profundiza en la amistad entre dos héroes. Hay más acción y más subidones de adrenalina que en la primera parte. Los chistes también son más divertidos, principalmente debido al debut de Leo Getz (Joe Pesci). ¿Qué más le puede faltar?

MAGNUM .44 (1973)
Los guionistas de Apocalypse Now y El Cazador trabajaron en el regreso de Clint Eastwood en la piel de Harry Callahan, adaptando el guión a la imagen del personaje. En esta entrega, Harry se las ve con un escuadrón asesino de policías corruptos que se toman la justicia por su mano colocando al típico policía malo del lado del sistema. Mientras que la mayoría de segundas partes simplemente repiten la primera película, Magnum .44 pone al protagonista en una nueva y provocadora situación que nos habla tanto de la política de los años 70 como del desarrollo de Eastwood como detective.

EL PADRINO: PARTE 2 (1974)
Cualquier segunda parte que pueda considerarse como una de las mejores películas de todos los tiempos tiene más que merecida su presencia en esta lista. La cinta nos muestra cronologías paralelas en las que, por un lado, el joven Vito Corleone (Robert De Niro) crea un imperio del crimen organizado, mientras que, por otro lado, su hijo mayor Michael (Al Pacino) lentamente va dejando de ser quien era por querer mantener el imperio forjado por su padre.  Esta auténtica obra de arte nos ofrece una dirección impecable y unas interpretaciones más que sobresalientes por parte de ambas estrellas, que incluso mejoran sus actuaciones en la primera entrega, que es por sí misma un clásico del cine.

EL SILENCIO DE LOS INOCENTES (1991)
Sí, lo has leído bien. Este thriller de Jonathan Demme es técnicamente una secuela de la película de Michael Mann, Cazador de hombres, aunque en esta primera película el papel del psicótico Hannibal Lecter corre a cargo de otro actor. Con 5 premios Óscar, esta película es una obra maestra del género del horror con la que acabarás sentado al borde de tu asiento. El Lecter de Anthony Hopkins es una interpretación histórica en el mundo del cine, mientras que Jodie Foster se convirtió no solo en una gran actriz sino que además interpretó a la perfección la calma ante la tormenta de Hopkins. Algunos críticos dicen que la cinta de culto de Mann es superior. Con todo respeto, no estamos de acuerdo.

BATMAN REGRESA (1992)
Si el Batman de Tim Burton reinventó la película dedicada a este superhéroe, Batman regresa es el éxito de taquilla en su versión más interesante. Burton solo dirigiría una secuela si fuera él quien tuviera pleno control creativo, a través del cual diseñó una sátira política tan oscura como la noche misma en la que el Pingüino (Danny DeVito) es quien da las órdenes. La joya de la corona es Michelle Pfeiffer en el papel de Gatúbela, una representación cautivadora de una crisis psicológica. Es lo más atrevido que puedes conseguir para una película de verano de gran presupuesto, y le ha ido mucho mejor que la mayoría de las entregas del Caballero de la Noche.

COMANDO ESPECIAL 2 (2014)
Es muy difícil hacer una secuela de una comedia y que pueda acercarse a la original, y mucho menos mejorarla. Por este motivo aquí va nuestro reconocimiento a Channing Tatum y Jonah Hill por ser capaces de mantener lo mejor de Comando Especial y mejorarlo aún más en esta segunda parte con un toque universitario. Tatum, que se siente más cómodo haciendo papeles cómicos, acaba por echarse al público al bolsillo cuando dice (todos juntos): “Me llamo JEEEEFFF” y sale reforzado por la naturaleza autorreferencial del argumento, riéndose de las secuelas innecesarias.

AUSTIN POWERS, EL ESPÍA SEDUCTOR (1999)
Mike Myers se hizo dueño y señor del cambio de milenio con esta parodia, y mientras que la primera película había puesto ese pequeño universo a caminar, la secuela nos presentó sus personajes y frases más memorables. Mini Me y Marrano Pérfido se convirtieron en personajes favoritos de muchos y sus frases se citaron durante años entre los amantes de estas películas. Heather Graham puso mucha más diversión que Liz Hurley en su papel romántico, y todo esto sin olvidar la increíble banda sonora en la voz de Madonna. Seductor, sin duda alguna.

LA GUERRA DE LAS GALAXIAS EPISODIO V: EL IMPERIO CONTRAATACA (1980)
La más carismática de toda la saga. Digan lo que digan, nadie puede negar que esta secuela más oscura y repleta de aventuras marcó toda una época, no solo por tener una de las tramas con más sorpresas de la historia del cine sino también por tener un final que te deja pidiendo más. La película ha recibido tantas reverencias, que el autor y escritor de la misma, Lawrence Kasdan, volvió a trabajar en El despertar de la fuerza y la próxima entrega de la serie sobre el personaje de Han Solo.

TROPA DE ÉLITE 2 (2010)
Olvídate de Avatar y de la Guerra de las Galaxias. La mejor película brasileña de todos los tiempos también es uno de los mejores ejemplos de secuela que ha sabido mejorar a su predecesora. Una tropa antinarcóticos de la policía militar de Río de Janeiro explora la corrupción desde dentro del sistema, en el cual se ayuda a criminales a que prosperen y a que los pobres sufran. Esta segunda parte, que fue todo un éxito de taquilla, equilibra la violencia que transpiraba en la primera película mediante otras cuestiones que llegan al mismísimo corazón de los problemas del país.

GOLDFINGER (1964)
Si es, o no, la mejor película de James Bond, es algo que podríamos estar discutiendo durante horas. Si prefieres la elegancia de Moore o la aspereza de Craig, es algo que va en gustos. Lo que sí que está claro es que 007 contra Goldfinger estará siempre en los primeros puestos de todas las listas de favoritas, y lo estará porque es la cinta que estableció los estándares de las aventuras del agente 007. La película tenía a los mejores malvados, y su memorable plan para asaltar Fort Knox, así como la sofisticada elegancia de los años 60. Aparte de Ursula Andress, pocos atributos tiene la película Dr. No para competir con su secuela.

MISIÓN IMPOSIBLE III (2006)
La primera película de espionaje de Tom Cruise tenía estilo pero era excesivamente complicada. M: I 2 no fue más que un vídeo musical muy largo y confuso. La tercera parte revivió toda la franquicia. Philip Seymour Hoffman hizo un papel perfecto encarnando al ruin Owen Davian, y J.J. Abrams contribuyó con algo esencial al personaje de Ethan Hunt, interpretado por Cruise: el riesgo. El hecho de ponerle una esposa (Michelle Monaghan) – y por tanto algo que perder – añadió dosis de peligro a esta aventura. Y eso sin mencionar el debut de Benji Dunn, interpretado por el actor Simon Pegg, y su parte cómica con la que dio un toque diferente a la seriedad de la franquicia.

STAR TREK II: LA IRA DE KHAN (1982)
Después de que Star Trek: La Película se hundiera como una piedra, Kirk y compañía volvieron a lo más elemental. La Ira de Khan toma prestadas viejas aventuras navales, especialmente de Moby Dick, así como temas que giran alrededor de la venganza, la edad y la muerte, y los lanza a territorios conocidos como la cubierta del Enterprise. No obstante, lo que hace que esta sea la mejor película de Star Trek es el viaje de Kirk, un héroe invisible que se ve forzado a enfrentarse a tanto su pasado como su mortalidad en una misma misión.

BATMAN: EL CABALLERO DE LA NOCHE (2008)
Incluso en una carrera tan ilustre como la de Christopher Nolan, la segunda película de la trilogía del Caballero de la noche es una de esas películas que costará superar. La cinta de Nolan siguió a Batman inicia pero con un toque detectivesco inspirado en joyas cinematográficas como Heat y en el mundo del cómic. Heath Ledger acabaría por convertirse en un icono de la cultura pop con su asustadiza y caótica interpretación de El Guasón. Es la versión cinematográfica definitiva del universo Batman, y la que otros directores han tenido problemas para igualar.

REC 2 (2009)
El género de horror basado en la recuperación de imágenes o grabaciones nos ha dado pocos clásicos; especialmente si tenemos en cuenta que hasta El proyecto de la Bruja Blair no le ha ido bien con el tiempo. No obstante, la película española REC transcendió para asustarnos a todos de verdad. REC 2 sigue a un equipo SWAT y a algunos observadores interesados al mismo escenario donde terminó la primera película. La cinta añade nuevas dimensiones tanto a la pantalla como a la historia, a la vez que nos permite conocer más puntos de vista y la posibilidad de que pudiera haber más brotes de zombis de lo que pensábamos.

THE RAID 2: BERANDAL (2014)
Después de que Hollywood sacara el máximo provecho al éxito de 2011, The Raid: Redemption (Dredd de 2012 es sorprendentemente parecida), el director residente en Indonesia, Gareth Evans, lo invirtió todo en esta secuela en la que el sobreviviente del ataque al edificio de la primera película se convierte en agente secreto, para una operación que durará años con el fin de arrestar a los jefes del crimen organizado de Jakarta. Escenas de lucha con toques de ballet decoran una trama complicada que acaba dándonos una de las mejores películas de esta década. Aunque era difícil mejorar lo que era una película de acción casi perfecta, Evans lo consigue, y con creces.

LOS LOCOS ADDAMS 2 (1993)
La clave de una secuela es poner a personajes interesantes en nuevas situaciones, que es exactamente lo que Barry Sonnenfeld hizo de manera maravillosa en Los locos Adams 2. Poner a los niños en un feliz campamento de verano abrió el camino a deliciosas escenas de humor negro (que culminaron en una celebración alternativa del Día de Acción de Gracias). El reparto principal, Anjelica Huston y Raúl Julia, mejoran su brillante y original actuación, pero finalmente es la excelente y vampiresca actuación de la interesada Debbie (Joan Cusack) la que lleva la cinta más allá en términos de calidad.

ALIEN 2: EL REGRESO (1986)
Dado que Alien de Ridley Scott es una de las películas más emblemáticas de su género, esta elección puede resultar polémica. No obstante, James Cameron dio un giro de 360 grados a la segunda película, convirtiéndola en una cuestión de músculo con marines fuertes y excelentes frases como “¡Se acabó el juego, amigo!”. El hecho de sumar al personaje de Newt dio a Ripley (Sigourney Weaver) un lado más tierno, y un motivo para luchar y hacerse camino en otro planeta asediado por xenomorfos. Aunque comparar estas películas puede ser difícil, la película de Cameron es memorable, además de ser la última gran película de Alien.

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