Desplaza

El verano es la esencia de los asados, las fiestas de jardín y demás reuniones relajadas al aire libre que suelen alargarse hasta entrada la noche, cuando el calor del día ya se desvanece y la noche calma el ambiente. Independientemente del tamaño o del tipo de espacio del que dispongas, no hay mejor momento que éste para acicalar las cosas con un poco de arte y cariño, y transformar tu espacio exterior en el refugio perfecto para el verano.

[Foto arriba: studio-shed.com]

Crea un oasis en tu jardin

El secreto de crear un oasis en tu propio jardín o en tu patio es saber identificar y definir cada espacio en concreto. Piensa en ello como si estuvieras creando un plan maestro para tu patio. Déjate guiar por la funcionalidad: ¿Tienes un rincón tranquilo que sea perfecto para crear un jardín zen con un elemento de agua, o bien una zona que sea abierta y lo suficientemente espaciosa como para hacer una hoguera o crear una área de asientos con sombra? ¿Qué te parece una rama robusta de un árbol que sea capaz de soportar un par de hamacas en forma de silla?

Una vez te hayas hecho una idea de tu propio patio o jardín, el próximo paso será conectar los espacios y destacar y definir cada una de las áreas diferentes. Eso puede significar que tengas que crear un serpenteante sendero de piedras en dirección al jardín zen, o un par de velas triangulares para crear un espacio de sombra y entretenimiento. Ladrillos y asfalto, un parterre alzado, gravilla descompuesta y piedras decorativas son solo algunas de las maneras que tienes de crear espacios distintos en tu patio o jardín, independientemente de lo grande o pequeño que sea.

Haz bricolaje para tu cobertizo

Si una cosa está clara es que los espacios pequeños están de moda. Y con razón, porque el pequeño movimiento está dando nueva vida a los cobertizos, salas de juegos para niños y otras zonas y estructuras de pie que yacen olvidadas en algún rincón y que podrías encontrar en un patio o jardín.

Para crear tu propio refugio-cobertizo, empieza con el atractivo exterior. Si te has propuesto modificar un viejo cobertizo, entonces no hay duda de que al exterior le vendría bien una mano de pintura. No seas tímido con los colores y añádele colores de contraste en las lamas, los bordes o las contraventanas. El paisajismo también ayudará a darle un sentido de lugar en concreto. No tiene por qué ser complicado ni exagerado; unas jardineras, unas parras, una hierba verdosa o incluso un jardín de rocas.

Actualiza el interior cambiando el suelo por uno más moderno y fácil de instalar, como los de vinilo, que son resistentes al agua y a los vertidos, o bien los de baldosas de caucho que se colocan como si fuera un puzle. Depende de ti si deseas instalar aislamiento o incluso un enyesado, o si bien te decantas por un estilo interior más rústico.

Respecto a la electricidad, un kit de panel solar instalado en el exterior será suficiente para que puedas tener iluminación, altavoces, cargadores o incluso una mini-nevera. Y, aunque no sea necesario, las actualizaciones que actualmente gozan de mayor popularidad incluyen añadir más ventanas para disponer de mayor luz natural y reemplazar la puerta de la estructura por otra de diseño más atrevido, como por ejemplo una puerta corredera en voladizo que siempre permita que el exterior entre dentro del espacio interior.

Del balcón al escondite

¿No tienes jardín? No hay problema. Hay muchas y fáciles maneras de darle a tu balcón más personalidad y funcionalidad a la vez, y al mismo tiempo sombra y privacidad. Lo primero es lo primero. Empieza con una buena limpieza; te sorprenderás de ver todo lo que puedes llegar a barrer y fregar. Si tu balcón tiene una barandilla de rejas, añádele un vallado de caña o junco a lo largo de los hierros para que el balcón adquiera más privacidad y más aislamiento contra el sol también.

Alternativamente, dependiendo de la profundidad de tu balcón, unas macetas con plantas bien verdes harán maravillas a la hora de crear sombra y más privacidad, a la vez que también te darán la sensación de estar rodeado por un pequeño oasis verde; las opciones de bajo mantenimiento incluyen el bamboo, las palmeras en tiestos, las drácenas o los árboles paraguas. Una instalación vertical de lamas de madera ofrece aislamiento contra el sol y, si es lo suficientemente sólida, también podrá soportar los tiestos para las hierbas, flores o plantas decorativas que desees colgar con ganchos a fin de crear un jardín colgante de diseño propio. Añádele también otros elementos decorativos, como pequeños espejos de formas diferentes, que llamen la atención.

Por encima de todo, la clave es siempre el confort. Los elementos textiles como las alfombras tejidas robustas y los cojines cómodos para el suelo, o para las sillas o cualquier otra butaca que hayas decidido incluir, rápidamente te ayudarán a crear una sensación de lugar cómodo y acogedor.

Disfruta de los cielos estrellados

Cualquier espacio al aire libre debería estar preparado para vivir la transición natural del día a la noche mediante una iluminación que ayude a mejorar el ambiente. Las buenas noticias al respecto es que, en cuanto a la iluminación nocturna, las opciones son infinitas; un cordón de bombillas blancas, linternas colgantes, luces centelleantes y opciones solares. Las velas LED sin llama en el interior de recipientes transparentes diferentes, como jarras de tamaños y diseños distintos, añadirán una iluminación bonita y agradable, como también lo hará la iluminación perimetral o a lo largo de los caminitos creados en el jardín.


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